Más de 300.000 personas acudieron a las urnas desde este martes en el estado de Georgia (sur de Estados Unidos), que arrancó el periodo de voto anticipado.
Este número de votantes -unos 305.000– supuso un récord en el estado, según las autoridades electorales. Gabriel Sterling, encargado de supervisar el proceso electoral, aseguró que es un 123 % más que el anterior récord.
El secretario de Estado de Georgia y jefe de Sterling, Brad Raffensperger, aseguró que «el sistema de votación de Georgia ha demostrado ser seguro, eficiente y preciso«.
«Por eso estamos en la cima en integridad electoral y conveniencia para los votantes, a pesar de los años de mentiras de (la líder estatal demócrata) Stacey Abrams, abogados fracasados y ‘expertos'», añadió.
Georgia tiene cerca de 7 millones de votantes censados.
El legislativo de Georgia, controlado por los republicanos, ha aprobado en los últimos años una serie de leyes que, según los demócratas, podrían dificultar el acceso al voto.
Raffensperger, funcionario electo republicano, se enfrentó en 2020 a los intentos de Trump de interferir en el resultado electoral, ganándose así la enemistad del expresidente y de gran parte de su partido.