La Comisión de Seguridad Ciudadana aprobó el articulado del proyecto de ley que establece penas para los conductores que se fuguen de un control policial.
En este contexto, se trabajó en una redacción final que evitará posibles conflictos con otras leyes, como aquellas que regulan la conducción bajo la influencia del alcohol, con el objetivo de armonizar la nueva normativa con otras infracciones y delitos establecidos en la Ley de Tránsito, garantizando coherencia y efectividad en su aplicación.
El parlamentario de Renovación Nacional, Andrés Longton, uno de los autores del proyecto, se refirió a las posibles penalidades de la futura norma.
Las sanciones varían según las consecuencias de la fuga, si hay daños o lesiones, debiendo pagar multas y cumplir penas privativas de libertad que van de los 41 días hasta los 5 años, a lo cual se suma la suspensión temporal de la licencia de conducir.
Este proyecto de ley va dirigido solo a quienes no se encuentren en estado de ebriedad al momento del control, lo cual aplicaría a otras leyes ya en vigencia.